El año pasado nos presentamos a la convocatoria “Ciencia Abierta” ofrecida por la Fundación Donaldson para financiar proyectos que motiven el desarrollo de las habilidades científicas de estudiantes de comunidades en niveles socioeconómicos bajos. Con gran alegría recibimos la noticia de que fuimos beneficiarios de esta convocatoria, lo cual nos permitió adquirir equipos de laboratorio que favorezcan la experimentación y la investigación en el CASFA.. Desde entonces, hemos emprendido un camino para construir, adaptar y hacer realidad la ilusión de tener un salón de ciencias para nuestros estudiantes. ¡Y finalmente, en el mes de junio, oficialmente inauguramos este espacio!
Este espacio fue pensado con el objetivo de afianzar y aplicar los conocimientos teóricos que se han desarrollado en clase y poder utilizarlos en un contexto práctico y real. Sin duda, estamos haciendo este objetivo real, a la fecha los estudiantes de cuarto a once han tenido la oportunidad de conocer el salón y han realizado prácticas de laboratorio, por ejemplo, han podido identificar cambios de estado, reconocer partes de las flores y de microorganismos a través del microscopio, entre otras. Toda la comunidad está feliz y agradecida por este espacio, los estudiantes han estado muy animados con las prácticas que se han realizado y han reconocido el valor de estas experiencias para la comprensión de los fenómenos naturales.
¿Y ahora, qué sigue? Con este espacio, nos proyectamos como una comunidad que sigue trabajando para alcanzar un nivel destacado en ciencias y tecnología que les permita a nuestros estudiantes aspirar a programas de instituciones de alta calidad. También, buscamos promover la participación de nuestros estudiantes en eventos de ciencias para ampliar sus aprendizajes y las oportunidades de vivir otras experiencias.
Finalmente, estamos trabajando en la estructuración de un proyecto de ciencias experimentales que proporcione a los estudiantes una formación orientada a la solución de problemas cotidianos que impacten y transformen su vida y la de su comunidad. En este sentido, queremos comenzar a hacer proyectos que vinculen a la comunidad para que los estudiantes puedan que puedan aplicar los conocimientos en problemas prácticos y reales del barrio, por ejemplo, hacer estudios de PH de los suelos para huertas urbanas, desarrollar estudios sobre la potabilidad del agua, dado que en algunas partes del barrio hay problemas con los alcantarillados del agua, y hacer proyectos de emprendimiento.
Sin duda, este espacio abre numerosas posibilidades para desarrollar el pensamiento científico, crítico y creativo de nuestros estudiantes, al mismo tiempo que fomenta su compromiso con la comunidad y les permite aplicar sus habilidades científicas en la resolución de problemas prácticos que generen un impacto positivo en la transformación social.. Agradecemos a la Fundación Donaldson, al esfuerzo de las Hermanas Franciscanas, a nuestros docentes de las áreas de las ciencias naturales y a todos ustedes, porque juntos continuamos trabajando por una mejor formación y futuro de nuestros niños, niñas y jóvenes.